EDUCACIÓN

Estudiantes descompuestos de frío y clases suspendidas por falta de gas en aulas porteñas

Ante el reclamo por las bajas temperaturas en el edificio nuevo del Yrurtia, el Gobierno de la Ciudad envió caloventores. Pero como el lugar sólo cuenta con luz de obra, el servicio eléctrico colapsó. “Se decidió que los chicos no vayan porque el clima dentro del colegio es gélido”.



“Edificio nuevo, problemas viejos”, dice el mensaje que difundieron estudiantes de la escuela Yrurtia, mudada a nuevas instalaciones tras largos reclamos, pero enfrentando la falta de gas y el clima “gélido” en la nueva sede. A tal punto, que desde que comenzó la ola polar “ya muchos chicos se enfermaron y se retiraron descompuestos”. Por eso, se suspendieron las clases en los talleres, y en el bachiller “casi no hay chicos” porque por decisión de las autoridades no se computa la falta.

“Hace un par de meses que nos mudaron al nuevo edificio en Av. J.B. Alberdi 4139. Al día de hoy, la escuela no tiene gas, ni luz que soporte los caloventores que nos dieron para las aulas y talleres (que tampoco nos calientan los ambientes). Por ende, hay reiterados cortes de luz (al tener aún luz de obra, tenemos un generador eléctrico que no dan abasto). A consecuencia de todo esto: pasamos frío, no hay microondas para calentar la comida de les alumnes, ni agua caliente, no hay luz en los pasillos, no hay agua (por los tanques), no se pueden usar los ascensores (tenemos una alumna con movilidad reducida), entre otras cosas”, enumeraron alumnos y alumnas mediante un comunicado difundido por las redes sociales.



Ante la consulta de Nueva Ciudad, una mamá de esa comunidad educativa contó que “las clases se suspendieron en los talleres. No hay gas en todo el edificio y el Gobierno de la Ciudad mandó estufas, pero como tenemos luz de obra el sistema colapsa cada vez que enchufan las estufas. Habían mandado un generador que ayer se sobrecargó y empezó a largar humo y decidieron que los chicos no vayan porque el clima dentro del colegio es gélido. Es un edificio muy grande, todo vidriado y adentro hace tanto frío como afuera”.

La mujer agregó que “en el bachiller no están suspendidas las clases pero casi no hay chicos porque por el tema de la baja temperatura dentro del colegio la supervisora y el director dijeron que no iban a computar las faltas porque ya muchos chicos se enfermaron, se retiraron descompuestos. Tuvimos una reunión anoche los padres con la supervisora y el director y se acordó tomar determinadas medidas por estos días muy fríos, y esperar a que se dignen a terminar la obra”.

Los problemas del nuevo edificio no sólo aparecieron ante el frío polar. “Los chicos están en el colegio con la mitad de las aulas habilitadas. De las 20 aulas de bachiller y 20 de taller, nos dieron 10 de cada una. El resto están cerradas porque el gobierno aparentemente quiere traer otro colegio. Pero los chicos no entran en las aulas. Hay cursos de taller que están dictando en la misma aula dos cursos distintos, con dos profesores distintos. Bastante precario el tema”, denunció la madre de un estudiante.

El jueves al mediodía, la comunidad educativa realizó un “frazadazo” de reclamo. Y no se trata de un caso aislado. Según consignó el periodista especializado en educación Martín Suárez, falta gas en la escuela 4 del DE 21; la 18 del DE 21; la Escuela 19 del DE 19; y el Comercial 5 del DE 3, entre otras.


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