EMERGENCIA SANITARIA

La pandemia en la comunidad educativa: más muertes, exposición al virus y pedidos de oxígeno

Suman 17 las y los trabajadores de la educación fallecidos por covid desde el retorno de las clases presenciales en el distrito. El último fue Juan Carlos Guia, secretario de la Escuela de la Joya.



Juan Carlos Guia, secretario de la Escuela de la Joya “Maestro Joyero Sergio Lukez”, se convirtió en una nueva víctima fatal de la pandemia de coronavirus en la comunidad educativa, que ya despidió a otro trabajador en las últimas horas y lleva por lo menos 17 muertes desde el retorno de la presencialidad escolar en el distrito capitalino.

Guia trabajaba en el Centro de Formación Profesional de Almagro y fue despedido desde los sindicatos docentes, como la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) y Ademys.

Horas antes se había conocido el fallecimiento de Oscar Colombo, de 51 años, preceptor de la Escuela Técnica Nº4 del Distrito Escolar 5.

En tanto, mientras docentes sostienen clases virtuales pese a la suspensión impuesta por el Gobierno de la Ciudad para esta semana, la comunidad educativa da cuenta de situaciones críticas relacionadas con la pandemia, en una segunda ola que no da tregua.

Ademys, por caso, publicó un “llamado a la solidaridad” para pedir un tubo de oxígeno para el padre de una docente, internado en su domicilio.

Por su parte, un docente que fue papá recientemente usó su cuenta de Twitter para contar los riesgos a los que se expuso durante la presencialidad, cuando su compañera embarazada estaba exceptuada pero él debía cumplir con la asistencia al aula.

“Dijeron que la escuela no era riesgosa, que el protocolo y coso. Pero empezaron a brotar los casos, y un aislamiento acá y otro allá. Las balas picaban cerca. El número de casos iba en aumento, la panza de mí compañera también. ¿Qué hacer? ¿Renuncio? ¿Llegará la vacuna?”, contó en un largo relato sobre los temores durante el embarazo y ahora con un recién nacido. “Sigue sin haber excepción para mí, sigo sin recibir vacuna y parece que no la recibiré jamás. Veré cuánto puedo estirar mi licencia para no exponerme ni exponer a mi familia. Amo la escuela pero en estas condiciones se vuelve una angustia total”, sentenció.


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