SESIÓN ORDINARIA

Pese al freno del Pro, el debate sobre el tarifazo llegó a la Legislatura porteña

Luego de que el oficialismo no diera quórum para una sesión especial sobre el aumento de tarifas, la presentación de dos proyectos sobre el tema introdujo el debate en la sesión ordinaria. Fuertes críticas de los espacios opositores.



La oposición porteña en la Legislatura finalmente tuvo espacio para debatir el tarifazo, pese a que el Pro no diera quórum a la sesión especial para tratar el tema. La discusión llegó de todos modos al recinto en la sesión ordinaria de este jueves, cuando se pusieron en consideración dos iniciativas vinculadas al aumento de tarifas. Así, hubo espacio para los discursos. Pero las medidas fueron rechazadas.

Las propuestas sobre tablas que permitieron introducir el debate, aunque terminaron rechazadas, fueron impulsadas por el PTS y el PO. Apuntaban a “declarar la emergencia tarifaria en materia de servicios públicos en el ámbito de la C.A.B.A” y al “rechazo a la quita de impuestos sobre las boletas de gas y agua anunciadas por el Jefe de Gobierno” (por considerarla como “una medida cosmética”). La primera obtuvo 15 votos afirmativos, 39 negativos y 2 abstenciones. La segunda, 3 votos afirmativos, 49 negativos y 10 abstenciones.

Más allá de la votación negativa, el repudio al tarifazo –y a la decisión del oficialismo de no dar quórum a la sesión especial- se hizo escuchar. “Nos gustaría que en alguna de las intervenciones del oficialismo nos cuenten qué piensan de ese faltazo deliberado que hicieron”, reclamó Myriam Bregman, del PTS. “Presentamos este proyecto sabiendo que no iban a venir a discutir. No nos asombra. En diciembre sesionaron con un Congreso vallado”, comparó.

La legisladora señaló que “la emergencia tarifaria se ha discutido en numerosos municipios del interior del país. Corresponde que lo debata esta legislatura de la Ciudad. La Ciudad de Buenos Aires no es esa belleza que se ve en las publicidades oficiales. Miren si no tenemos que discutir las tarifas ante un aumento de más del 1000 por ciento a quienes habitan la Ciudad”. Y pidió que “el dinero que salga de los que hacen grandes negociados, de las grandes constructoras, que cada vez ganan más mientras los vecinos tienen servicios de peor calidad y cada vez más caros”.

Desde el mismo espacio político, Patricio del Corro, cuestionó que “en la ciudad más rica del país desde que asumió Macri aumentó un 1600 por ciento la luz, un 1013 aumento el gas, y un 1550 el agua”. Remarcó que “los trabajadores no tenemos que pagar este tarifazo. Queremos que este sea el primer paso para seguir discutiendo e la tarifazo en la ciudad”.

Por su parte Andrea Conde, de Unidad Ciudadana, se refirió al aumento en el transporte público. “El subte es un medio de transporte que usan un millón de ciudadanos por día hábil. Desde julio de 2016 aumentó un 244 por ciento y  va a llegar a más de un 300 por ciento acumulado”, resaltó. Y agregó: “Con estos incrementos uno creería que el transporte mejoraría, que se cambiarían los coches y que se ampliaría la red, pero la realidad es que no, es que el pueblo sigue viajando como ganado” y advirtió que “se niegan a buscarle una solución a este problema. ¿A dónde vamos a llegar con esta situación? Rodríguez Larreta está conduciendo a esta ciudad a un caos”.

Leandro Santoro, también de Unidad Ciudadana, se preguntó “por qué un bloque que hace del diálogo una bandera política desiste de la posibilidad de discutir el tema que más angustia a los porteños”.

A su turno, el radical Juan Francisco Nosiglia -por Suma+ y Mejor Ciudad- planteó que es “inevitable no hacer un repaso por la situación que se encontró el Gobierno Nacional en el 2015, luego de 12 años de tarifas congeladas” y asimismo propuso “retrotraer las tarifas a diciembre del 2017 y dejar sin efecto los aumentos en las tarifas del transporte público a partir de junio”.

Por último, el vicepresidente primero de Vamos Juntos, Maximiliano Ferraro, apeló a la ‘pesada herencia’: “A partir del 2015 todos acordamos que estábamos recibiendo un país que iba al colapso energético”, dijo, y resaltó que “heredamos una situación insostenible en materia de subsidios; las tarifas se congelaron como casi nunca en la historia, más de 12 años estuvieron así y los subsidios no distinguían entre quienes apenas podían mantenerse y aquellos que vivían en un country”.

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