INVESTIGACIÓN

El francotirador que atacó a militantes de Nuevo Encuentro es buscado por la Interpol

La carátula de la causa pasó a ser por intento de homicidio y se negó la exención de prisión solicitada por la defensa. Alejandro Fabián Sidero aportó dinero a la campaña del PRO, salió del país el 6 de abril y aún no volvió.

Luego de conocerse la identidad del tirador que atacó a balazos a militantes de Nuevo Encuentro durante la inauguración de su local en Villa Crespo el 4 de marzo, la Cámara Federal aceptó los planteos de la querella y cambió la carátula a intento de homicidio y denegó la exención de prisión solicitada por su defensa.

El informático tirador es Alejandro Fabián Sidero, que actualmente se encuentra prófugo y es buscado por la Interpol. Durante su ataque hirió a dos personas, Daina Soto y Florencia Girotti, que se encontraban en la inauguración del local de Nuevo Encuentro.

El juez de Instrucción Roberto Oscar Ponce cambió la carátula de la causa a intento de homicidio y resolvió incluir al informático aportante a la campaña del PRO en el registro de “Wanted Persons” ya que, tras el ataque, huyó de Villa Crespo con destino a los Estados Unidos donde permanece desde entonces.

Un mes después del tiroteo Sidero salió del país el 6 de abril y aún no regresó. El Tribunal deja abierta la posibilidad a la solicitud de extradicion por vía diplomática.

El informático tirador es Alejandro Fabián Sidero, que actualmente se encuentra prófugo y es buscado por la Interpol. Durante su ataque hirió a dos personas, Daina Soto y Florencia Girotti, que se encontraban en la inauguración del local de Nuevo Encuentro.



También, dentro de las novedades judiciales, el juez Ponce no hizo lugar a la exención de prisión que había solicitado la defensa.

La misma noche del ataque, se radicó la denuncia. Ese día no lograron hacer efectivos los pedidos de allanar el edificio del cual provinieron las balas. Los abogados de Soto y Gili y el Nuevo Encuentro se presentaron como querellantes para impulsar la investigación. Pidieron medidas de prueba, nombraron peritos de parte y fueron reclamando medidas que lograron hacer avanzar la causa.

Gabriela Cerruti relata en una nota publicada en el portal Nuestras Voces que durante un mes, se siguió la posibilidad de que el atacante hubiera sido un vecino que se había comunicado al 911 con quejas violentas por la realización del acto, pero el arma hallada en su poder no coincidía con el calibre de las balas encontradas. El 22 de marzo finalmente, ante la inactividad de la fiscalía y la policía metropolitana, la querella pidió que se la reemplazara por la Gendarmería. A los seis días del cambio, Sidero dejó el país.

Cuando se allanó su domicilio, se encontró la pistola de la que salieron las balas que hirieron a las militantes. Además, se pudo conocer que Sidero aportó dinero a la campaña del PRO. Con una suma de $50, muestra su caracter de adherente activo al Partido.




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