FONDOS PÚBLICOS

Se lanzó la Liga de Gobernadores y encienden las alarmas en CABA

Está compuesta por 16 mandatarios provinciales del Frente de Todos (FDT) y tiene como ejes principales la reforma de la Corte Suprema de Justicia y la disputa con la Ciudad de Buenos Aires por la distribución de recursos, y subsidios en energía y transporte.


Son 16 los mandatarios provinciales del Frente de Todos que lanzaron la nueva Liga de Gobernadores que tiene como objetivo estudiar dos problemáticas como son la reforma de la Corte Suprema de Justicia y la relación conflictiva con la Ciudad de Buenos Aires en torno a la distribución de ingresos desde el Gobierno Nacional y los subsidios en energía y transporte.

Esta nueva alianza entre gobernadores está compuesta por los representantes de Buenos Aires, La Pampa, Entre Ríos, La Rioja, Catamarca, Santiago del Estero, San Juan, Tucumán, Misiones, San Luis, Salta, Formosa, Chaco, Chubut, Tierra del Fuego y Santa Cruz.

El lema que dio impulso a las reuniones se reduce a la exigencia de “más federalismo y unidad nacional”, luego de los idas y vueltas con la gestión porteña.

Los 16 mandatarios que la integran son: Axel Kicillof, Sergio Ziliotto, Gustavo Bordet, Ricardo Quintela, Raúl Jalil, Gerardo Zamora, Sergio Uñac, Osvaldo Jaldo, Oscar Herrera Ahuad, Alberto Rodríguez Saá, Gustavo Sáenz, Gildo Insfrán, Jorge Capitanich, Mariano Arcioni, Gustavo Melella y Alicia Kirchner.



“Queremos representar a nuestras provincias más allá del partido o la coalición que las gobierne. Nuestra convocatoria es amplia y plural para fortalecer la democracia con la participación de todos y todas. ¡Ese es el desafío!”, deslizaron en un documento publicado en redes sociales, luego del encuentro que mantuvieron en la sede porteña del Consejo Federal de Inversiones (CFI).

A través del comunicado, insistieron sobre la necesidad de mantener la unión “despojados de intereses partidarios”. “Queremos representar a nuestras provincias más allá del partido o la coalición que las gobierne”, destacaron.

“Asumimos un debate histórico frente a las asimetrías que imponen la infraestructura pública disponible; la competitividad de las economías regionales; la inequidad en el precio del combustible; las asimetrías de las tarifas energéticas y en los subsidios la transporte”, apuntaron.

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