COMUNA 15

Se inauguró una biblioteca al paso en La Paternal

Paternal Cultura y el EEPI Sholem colocaron una biblioteca al paso en la plazoleta Raymundo Gleyzer de La Paternal. El fin es compartir libros con sentido comunitario y fomentar la lectura.


El barrio de La Paternal tiene una nueva biblioteca al paso, la misma queda en la plazoleta Raymundo Gleyzer, ubicada en Espinosa y Donato Álvarez. La iniciativa fue de Paternal Cultura junto al Espacio Educativo de Primera Infancia (EEPI) Sholem. La biblioteca fue Intervenida por la artista Jennifer Simono que también pintó el mural frente al cine teatro Taricco.
 
Milagros Chiara de Paternal Cultura contó a Nueva Ciudad que “veníamos con la idea hace bastante, porque en esta plaza ensaya la murga Lagamur Delrioba, está la escuela Provincia de Mendoza y en épocas normales se juntan muchos chicos, a unas cuadras está la biblioteca Becciú, entonces nos parecía que en ese lugar tenía que haber una biblioteca”.
 

“La biblioteca la armó un amigo con unas maderas que tenía y Poppy la pintó. Tuvimos muchos problemas para ponerla porque era complicada la estructura para que no se caiga, no lastime a nadie, soporte la lluvia. Hablando con Vanina (directora pedagógica del EEPI Sholem) decidimos hacerlo y la instalaron dos chicos que trabajan en el EEPI. La idea es que la gente lleve un libro y deje otro y que no funcione como depósito, tener en cuenta de dejar algo que le pueda interesar al otro”, explica Milagros.
 
En La Paternal hay otras cuatro bibliotecas al paso. Todas estas experiencias son autogestivas con la idea de compartir libros y fomentar la lectura:

Biblioteca Elsa Lombardo Verza, en honor a esta vecina del barrio que es escritora, queda en la esquina Julio Cortázar, ubicada en Paz Soldán y Bielsa.
La biblioteca al paso de Llantén, ubicada en La Huerta de la Cuadra, en Biarritz y Caracas.
Biblioteca Julio Canestrari, también en honor a este vecino ilustre del barrio, queda en la esquina de Elcano y Balboa, en La Isla de La Paternal.
Bibliotequita Cuarentena, ubicada en Cucha Cucha y Remedios de Escalada de San Martín, Blanca Vega, que es titiritera la abrió durante la cuarentena por Covid-19, en la ventana de su casa.


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