COMUNA 5

Hernán Gorreta: “El Estado tiene que ser el nexo para incentivar las relaciones entre lxs ciudadanxs”

Comunero por el Frente de Todos en la Comuna 5, Hernán Gorreta habló con Nueva Ciudad sobre cómo llegó a la política, cómo está la Comuna 5 y qué proyectos tiene.



Hernán Gorreta milita en La Cámpora, la semana pasada asumió su mandato como miembro de la Junta Comunal 5, que abarca los barrios de Almagro y Boedo. En diálogo con Nueva Ciudad contó cómo llegó a la política, cómo está la Comuna 5 y qué proyectos tiene para la misma.
 
¿Cuál es tu trayectoria política y social? ¿Cómo llegaste a la política?
Empecé a interesarme en la política desde muy chico. Comencé a militar en el ´93, en el Centro de Estudiantes del Comercial 19 de Caballito, justo cuando se daba la pelea contra la reforma educativa del menemismo, que era básicamente la reducción del presupuesto educativo y eso nos perjudicaba a muchos jóvenes. Y en medio de toda esa lucha, el contexto de “relaciones carnales” que Menem tenía con Bush, el presidente de EEUU de aquel entonces. Fue una época de mucha resistencia al neoliberalismo que me marcó, sin duda.
A la militancia partidaria me sumé un año después, puntualmente al Frente Grande, en un local en Colombres al 1100, ahí me recibió el compañero Alberto Barba, que hoy continúa militando conmigo. Luego milité en otro local del Frente Grande, que conducía Delia Bisutti, secretaria general de su gremio y luego diputada. Estábamos en la zona de Parque Chacabuco y allí trabajamos en el año 2000 por la vuelta del corso al barrio. Teníamos un merendero y una  juegoteca en la Iglesia San Lorenzo Mártir, hicimos mucho por los pibes tan golpeados por aquella crisis.
En 2004 me sumé inorgánicamente al kirchnerismo, fue cuando Néstor abrió para todos las puertas de la ex Esma, ese acto en el Museo de la Memoria, cuando él recorrió el centro clandestino con los sobrevivientes y luego en nombre del Estado pidió perdón en ese discurso inolvidable, yo sentí una especie de “llamada”. Un compañero ex detenido que militaba conmigo, Quique Fukcman, nos dijo en una de las tantas discusiones políticas: “ese es el lugar donde tenemos que estar”. Y así fue que encontré, como muchos, mi verdadera identidad política.
Desde ese entonces participamos en varios actos, hasta que en 2008 nos encontramos en la Plaza de Mayo durante el conflicto del campo con varios compañeros y compañeras que luego conformaron La Cámpora y a partir del 2009 militamos en la organización política más grande de Latinoamérica.
Pasamos momentos lindos y tristes, muchos inolvidables. Vivimos e hicimos tantas cosas que pareciera mucho más que una década. Hoy, luego de 4 años de macrismo, cuando se nos acusó de barbaridades y todo tipo de mentiras, se nos persiguió en los trabajos, en todos los medios hegemónicos se nos estigmatizó, y cuando incluso algunos compañerxs sufrieron agresiones en sus espacios de militancia, a pesar de todo eso, acá estamos, con mucha fuerza y esperanza renovada, porque nunca abandonamos nuestros ideales.
Desde lo social integro la Casa Cultural Los Dandys de Boedo, que alberga la primera murga del barrio fundada en 1956, y con más de 150 integrantes.  Desde hace cuatro años también soy el secretario general de la Asociación Vecinal Florentino Ameghino, fundada a principios de los ‘80, en la avenida Independencia al 4200, años atrás había un baldío que era un juntadero de mugre y ratas, los vecinos lo recuperamos y logramos tener un espacio verde que disfrutan todxs. Hoy con más de 900 socios es un lugar destinado a la promoción del deporte, la cultural y a dar contención.
 
¿Cómo ves a tu Comuna en este momento?
Estamos en un momento en que las comunas del centro han sido dejadas de lado en su desarrollo, una pena porque tenemos un potencial turístico y cultural para explotar.
En materia de educación en estos últimos 12 años no se construyó una sola escuela en la Comuna, nos están faltando dos jardines maternales en cada barrio, o sea que hay 550 pibes sin vacantes en nuestra Comuna.
En cuanto a la salud, hay un CeSAC, el 38, que está en Almagro, muy descuidado y al que le faltan prestaciones. Un ejemplo de su abandono: tiene un equipo para hacer radiografías pero por falta de revelador no está funcionando, es imperdonable.  En Boedo estamos peleando por tener un propio CeSAC en el barrio, ya que el Gobierno de Larreta vende terrenos en nuestra Comuna, bien podrían servir esos ingresos para la construcción de un centro de salud.
 
¿Qué análisis haces de estos 8 años de descentralización? ¿Pensás que la Ley 1.777 se cumple?
La ley de Comunas no está reglamentada, lo cual hace que la interpretación del gobierno central, lleve adelante la aplicación muy arbitrariamente.
Creemos que en este proceso, las gerencias dependientes del Gobierno de la Ciudad hacen que retrocedamos diez pasos para atrás en materia de descentralización. El Gobierno porteño cree que descentralizar es desconcentrar los tramites que se realizaban antes en una sola oficina.
Hasta que no haya jurisdicción presupuestaria, nos va a faltar mucho en el camino de una efectiva descentralización en la toma de decisiones de la Comuna. Un ejemplo es hacer cumplir las prioridades presupuestarias del Consejo Consultivo.
 
¿Cuáles son tus proyectos para la Comuna?
Como bloque del Frente de Todos, tenemos varios proyectos, como seguir acompañando a lxs ciudadanxs para que podamos tener el CeSAC en Boedo y los jardines maternales que tanta falta hacen.
Además creo que en Boedo y Almagro hay un potencial enorme en materia de deporte y clubes de barrio y que el Estado puede trabajar en conjunto. Un ejemplo: crear la noche de los clubes de barrio, e invitar a lxs vecinxs a volver a cada club, porque hoy en día muchos clubes necesitan de la ayuda de la comunidad para estar en movimiento constante o algunos, incluso, para sobrevivir. También los clubes necesitan una ventanilla única para hacer trámites, eso simplificaría lo que el Gobierno de la Ciudad les solicita para tramitar subsidios.
Con respecto a la cultura y el turismo, debemos explotar la historia de nuestros barrios y especialmente, hacer un pase con descuentos exclusivos para los vecinos de la comuna. Vivimos en dos barrios repletos de salas de teatro, estamos llenos de centros culturales con amplia cartelera y demanda, queremos que nuestros propios vecinos disfruten de toda esa oferta cultural.  El Estado tiene que ser el nexo para incentivar las relaciones entre lxs ciudadanxs y las organizaciones barriales y los centros culturales. No soy ingeniero, pero quiero crear esos puentes.


COMENTARIOS