LEGISLATURA

Catalogan como infracción pintar el cordón de veredas de amarillo

Pintar sin permiso el cordón de la vereda de amarillo es catalogado como una infracción, lo prevé una reforma al Código de Tránsito; deberá pagar multa y despintarlo el infractor.


Pintar de amarillo sin permiso el cordón de la vereda, una práctica habitual entre los vecinos de la ciudad, fue catalogada como infracción por la Legislatura porteña. La conducta podrá ser castigada con multa y con el pago del costo de eliminar la pintura.
 
Los diputados porteños aprobaron, el jueves pasado, un proyecto del legislador Claudio Palmeyro, que contaba con despacho favorable de la Comisión de Tránsito y Transporte. En primer lugar, la ley sancionada modificó el Código de Tránsito porteño para establecer como infractor a quien pinte un cordón de amarillo sin autorización oficial.
 
"Sólo el gobierno de la ciudad puede ordenar el pintado de cordones, mediante un acto administrativo", recuerda la norma aprobada, que recibió 49 votos a favor. "Nadie puede reservarse por cuenta propia un espacio de estacionamiento, tanto mediante cordón amarillo o con señalización para discapacitados. No está librado al libre albedrío", dijo Palmeyro (Sindical Peronista).
 
La ley prevé que "el o los propietarios de la parcela frentista son solidariamente responsables con el infractor por la adulteración de las condiciones del segmento de cordón".
 
El castigo a los infractores será el previsto en el Código de Faltas para quien "coloque o instale paradas de transporte, señales o símbolos de tránsito sin autorización, o retire, traslade, oculte, modifique, deteriore o destruya cualquier tipo de señalización vial", estimado en una multa de 100 unidades fijas. Cada unidad fija equivale a medio litro de nafta súper.


COMENTARIOS