CIUDAD

Femicidio en Constitución: asesinaron a una mujer y detuvieron a su pareja

Se trata de Marina Inés Trípodi, tenía 38 años, dos hijas y era contadora del Ministerio de la Nación. El acusado por el femicidio fue capturado en Hurlingham, tras haber estado tres días prófugo.

Marina Inés Trípodi, era contadora y cumplía funciones en el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación, tenía 38 años y dos hijas. Marina fue asesinada el sábado pasado en su departamento de Constitución. Tres días después del crimen fue detenido su novio, un hombre de 37 años que también trabajaba en el organismo nacional y que fue identificado como Jonathan Bin.
 
Según consignó La Nación, fuentes judiciales y policiales informaron que la mujer fue maniatada, la golpeada y la amordazada. El crimen fue descubierto por su cuñada, quien encontró a la contadora “desvanecida y sin responder a los signos vitales”.
 
“Ha tomado estado público un femicidio cometido contra una trabajadora de esta institución, que nos ha provocado una profunda conmoción. Quiero que sepan que este ministerio se ha puesto a disposición de la Justicia para el esclarecimiento del caso, siempre respetando la investigación judicial en proceso. También estamos en diálogo permanente con su familia y sus compañeras y compañeros de trabajo”, sostuvo la ministra de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Raquel “Kelly” Kismer de Olmos en un comunicado interno.
 
Bin fue detenido anteayer a la mañana por detectives de la División Homicidios de la Policía de la Ciudad en su casa de Hurlingham. El juez en lo criminal y correccional porteño Damián Kirszenbaum lo indagó por homicidio agravado por haber sido cometido con violencia de género, delito que prevé una pena de prisión perpetua, y por abuso sexual. Se negó a declarar, informaron fuentes con acceso al expediente.
 
“Según los resultados preliminares de la autopsia, la víctima habría muerto por los politraumatismos sufridos. Como consecuencia de los golpes que le dio a su novia, Bin se quebró una mano. El abuso sexual habría ocurrido cuando la contadora estaba retenida”, dijo a La Nación un detective del caso.
La denunciante contó que un rato antes había estado del departamento de su cuñada, situado en la planta baja del edificio, y se llevó a sus sobrinas. La contadora se quedó con su novio.
 
“Cuando la cuñada de Trípodi regresó a la vivienda, se encontró con la contadora desvanecida y sin signos vitales. Profesionales del Servicio de Atención Médica de Emergencia (SAME) confirmaron el fallecimiento”, agregaron las fuentes consultadas.
 
Fuentes judiciales dijeron que el sospechoso extrajo del teléfono celular de la víctima el chip y lo colocó en otro móvil desde donde envió mensajes de hostigamiento la familia de la contadora. El magistrado, mientras estuvo prófugo, había dispuesto una custodia.
 
“Se decidió intervenir las líneas telefónicas de Bin y la de la víctima, que era utilizada por el sospechoso. A partir de distintas tareas investigativas, se pudo ubicar el presunto homicida en su casa de Hurlingham”, sostuvieron las fuentes consultadas.
 
Tras el homicidio de su novia, Bin no se presentó a trabajar en el ministerio, donde cumplía tareas administrativas. Estuvo oculto en diferentes lugares de la ciudad de Buenos Aires hasta que decidió regresar su casa. “En un momento en que el sospechoso salió del inmueble, los detectives policiales que estaban tras sus pasos, lo detuvieron”, dijo una fuente del caso.


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