Con un amparo, el GCBA retoma la discusión sobre el uso de pistolas Taser

En mayo del año pasado, la ANMAC autorizó la compra de 60 pistolas táser modelo X2 para la Policía de la Ciudad. Sin embargo, el funcionario que había autorizado la compra, Ramiro Urristi, fue despedido y a partir de ese momento quedó trabada la importación.
 
Ahora, el gobierno de Horacio Rodríguez Larrreta presentó en la Justicia un "Amparo por Mora" (artículo 28 de la Ley 19.549), con el objetivo de destrabar la importación de las pistolas Taser, herramienta prevista dentro del Sistema Integral de Seguridad Pública, hoy frenada por el Gobierno Nacional.
 
Desde el año pasado, el Ministerio de Justicia y Seguridad porteño reclamó ante ANMAC ser parte interesada del trámite para que haya una resolución favorable que nunca llegó. El ministro Marcelo D'Alessandro indicó que el problema que frena la autorización es ideológico: "Llegaron a comparar las Taser con las picanas de la dictadura”.
 
Y agregó que “en el siglo XXI, y en casi todos los países del mundo, se utilizan estas pistolas de baja letalidad”. En ese sentido, subrayó que “demonizaron el uso de estas armas y trabaron una herramienta fundamental para la seguridad de los 3 millones de porteños y las casi 4 millones de personas que diariamente ingresan a la Ciudad”.
 
“El objetivo es dotar a la Policía de la Ciudad de un armamento que le permita a sus efectivos protegerse y cuidar a los transeúntes y a los actores pasivos del hecho sin poner en riesgo la vida del atacante”, afirmó el funcionario.