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- 16.04.2012
Según las pericias, los frenos del tren del accidente de Once funcionaban correctamente
Según el informe presentado por los peritos de oficio al juez Claudio Bonadío por la tragedia ferroviaria de Once, los frenos del tren funcionaban correctamente y ninguna de las condiciones de infraestructura incidió en el siniestro, por lo que la responsabilidad principal por el accidente recaería sobre el motorman de la formación.
"Se verificó en todas las pruebas, ensayos, comprobaciones y mediciones que la formación estaba en plena capacidad para frenar ya sea mediante el freno de servicio, el freno de emergencia, el dispositivo hombre muerto o la inversión de marcha. Es decir que todos los sistemas de freno estaban en capacidad de operación para su utilización", dice el documento.
Los peritos señalan que "el tren frenó en todo el tiempo anterior al siniestro, tenía la plena capacidad para frenar al momento del hecho y frenó en todas las pruebas realizadas en el marco de la pericia". Y agregan: "En la formación de 8 coches había 7 compresores, de los cuales 6 compresores funcionaban adecuadamente".
Según la pericia tampoco hubo "reportes del conductor involucrado ni de ningún conductor anterior con el Puesto de Control Trenes respecto de eventuales avisos de fallas en la formación chapa 16". Según el mismo informe, el conductor "habría anulado el dispositivo de seguridad de 'Hombre Muerto'. Esta operación incorrecta anula la salida de la orden de frenado automático de emergencia. Sin perjuicio de lo cual, tenía aún disponible el freno de servicio, el freno de emergencia y la posibilidad de aplicar la contramarcha como último recurso".
Pero vuelven a desligar a la empresa concesionaria, al confirmar que "el conductor había cumplimentado todos los exámenes médicos, psicológicos y técnicos correspondientes, habiendo también aprobado todo el curso de conducción con sus correspondientes módulos".
El próximo miércoles se presentaría una ampliación del informe, con algunos datos que solicitó el juez Bonadío, y luego se estima que comenzaría la ronda de citaciones para tomar declaraciones, a la que asistirían representantes de los gremios, de la concesionario TBA, e incluso el secretario de Transporte.
"Se verificó en todas las pruebas, ensayos, comprobaciones y mediciones que la formación estaba en plena capacidad para frenar ya sea mediante el freno de servicio, el freno de emergencia, el dispositivo hombre muerto o la inversión de marcha. Es decir que todos los sistemas de freno estaban en capacidad de operación para su utilización", dice el documento.
Los peritos señalan que "el tren frenó en todo el tiempo anterior al siniestro, tenía la plena capacidad para frenar al momento del hecho y frenó en todas las pruebas realizadas en el marco de la pericia". Y agregan: "En la formación de 8 coches había 7 compresores, de los cuales 6 compresores funcionaban adecuadamente".
Según la pericia tampoco hubo "reportes del conductor involucrado ni de ningún conductor anterior con el Puesto de Control Trenes respecto de eventuales avisos de fallas en la formación chapa 16". Según el mismo informe, el conductor "habría anulado el dispositivo de seguridad de 'Hombre Muerto'. Esta operación incorrecta anula la salida de la orden de frenado automático de emergencia. Sin perjuicio de lo cual, tenía aún disponible el freno de servicio, el freno de emergencia y la posibilidad de aplicar la contramarcha como último recurso".
Pero vuelven a desligar a la empresa concesionaria, al confirmar que "el conductor había cumplimentado todos los exámenes médicos, psicológicos y técnicos correspondientes, habiendo también aprobado todo el curso de conducción con sus correspondientes módulos".
El próximo miércoles se presentaría una ampliación del informe, con algunos datos que solicitó el juez Bonadío, y luego se estima que comenzaría la ronda de citaciones para tomar declaraciones, a la que asistirían representantes de los gremios, de la concesionario TBA, e incluso el secretario de Transporte.
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