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- 09.04.2012
Piden indagar a los funcionarios del gobierno porteño por el derrumbe del boliche Beara
El fiscal de instrucción Andrés Madrea insistió en su pedido para indagar a los funcionarios del gobierno porteño que intervinieron en la habilitación del boliche Beara, del barrio porteño de Palermo, donde en 2010 se derrumbó un entrepiso y provocó la muerte de dos jóvenes.
El fiscal le reclamó a la jueza Alicia Iermini que convoque a los "imputados no indagados" Martín Farrell, Pablo Saikauskas, Norberto Cassano, Carlos Mustapich e Isaac Rasdolsky.
En el pedido el fiscal explicó que reiteraba "formal solicitud de que la causa en su totalidad reanude su avance de manera conjunta y sistemática, por la imperiosa necesidad de avanzar sobre la verdad de lo acaecido".
Farrell fue titular del área de Habilitaciones hasta que ocurrió el accidente, en tanto Saikauskas estaba a cargo de la Dirección de Habilitaciones Especiales y Cassano era jefe del Departamento Esparcimiento. Por su parte, Mustapich era el inspector que habría concedido la autorización para el funcionamiento del boliche y Rasdolsky, el arquitecto encargado de verificaciones.
El representante del ministerio público también extendió el pedido de indagatorias a "quien avaló la construcción derrumbada y los trámites municipales que permitieron que el mismo lugar del delito existiera como tal, el maestro mayor de obras Gustavo Amarú, y los gestores Leandro Camani y Matías Luis Pantarotto".
El fiscal Madrea insistió en que "hay elementos de prueba "abundantes pese al tiempo transcurrido y la natural clandestinidad de pagos y cobros de corrupción pública y privada que, no está de más recordar, realizan todos sus esfuerzos en pos de lograr impunidad".
El fiscal le reclamó a la jueza Alicia Iermini que convoque a los "imputados no indagados" Martín Farrell, Pablo Saikauskas, Norberto Cassano, Carlos Mustapich e Isaac Rasdolsky.
En el pedido el fiscal explicó que reiteraba "formal solicitud de que la causa en su totalidad reanude su avance de manera conjunta y sistemática, por la imperiosa necesidad de avanzar sobre la verdad de lo acaecido".
Farrell fue titular del área de Habilitaciones hasta que ocurrió el accidente, en tanto Saikauskas estaba a cargo de la Dirección de Habilitaciones Especiales y Cassano era jefe del Departamento Esparcimiento. Por su parte, Mustapich era el inspector que habría concedido la autorización para el funcionamiento del boliche y Rasdolsky, el arquitecto encargado de verificaciones.
El representante del ministerio público también extendió el pedido de indagatorias a "quien avaló la construcción derrumbada y los trámites municipales que permitieron que el mismo lugar del delito existiera como tal, el maestro mayor de obras Gustavo Amarú, y los gestores Leandro Camani y Matías Luis Pantarotto".
El fiscal Madrea insistió en que "hay elementos de prueba "abundantes pese al tiempo transcurrido y la natural clandestinidad de pagos y cobros de corrupción pública y privada que, no está de más recordar, realizan todos sus esfuerzos en pos de lograr impunidad".
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