COMUNA 15

¿Qué son los CENS?

En La Paternal existen tres Centros Educativos de Nivel Secundario donde se puede estudiar en tres horarios diferentes. La inscripción abre en noviembre para cursar el año que viene.


Los Centros Educativos de Nivel Secundario (CENS) Nº 10, 21 y 61 funcionan desde hace dos años en Balboa 210, en el ex edificio de la escuela especializada en música “Juan Pedro Esnaola” que ahora reside en el barrio de Saavedra. Nueva Ciudad estuvo charlando con Alberto y Julio, directores de los CENS Nº 10 y 61 respectivamente.
 
En los CENS se puede cursar el secundario en tres años o menos, de acuerdo a las materias que se tengan aprobadas, es público, gratuito y se otorgan títulos oficiales. Fueron creados en los años 70 para que los mayores de 18, con primario completo, puedan estudiar.
 
En los CENS Nº 10, 21 y 61 se egresa como Perito Comercial especializado en Administración de Empresas o como Perito Electromecánico. Se puede cursar en tres turnos diferentes: por la mañana (de 8.30 a 12.15hs), por la tarde (de 15 a 18.45hs) o el vespertino (de 17.15 a 21hs), de lunes a viernes.
 
Alberto Collaud, director del CENS Nº 61 cuenta a Nueva Ciudad que “esta es una experiencia inédita porque los CENS nunca han tenido casa propia, por lo general siempre han estado ubicados en escuelas primarias, compartiendo edificio con todas las dificultades que eso implica, o en entidades con convenio”.
 
“Los CENS nacen en los años 70, y van a tener un largo camino en la educación de adultos. Tenían que ver con llevar la secundaria a distintas matrículas, podían ser fábricas, sindicatos, empresas del estado y lo que se hacían eran convenios”, continúa Alberto. “Nacieron bajo la Dirección Nacional de Educación del Adulto, conocida como la DINEA, así funcionó hasta los años 90 que, durante la presidencia de Menem, con la Ley Federal de Educación, el Ministerio de Educación pasa a ser un ministerio sin escuelas porque pasan a depender de cada distrito, entonces los CENS que eran a nivel nacional unos 300, se repartieron en distintos distritos. Las privatizaciones hicieron que queden menos CENS. En Capital Federal se mantuvieron y crecieron, por suerte. En este momento funcionan 92 CENS”. 
 
En los inicios hubo CENS en las empresas como la Ford, funcionaban en los sindicatos como Luz y Fuerza, en el Correo. Por ejemplo, el CENS Nº 61 tenía un convenio con AySA, el Nº 21 funcionaba en Perú y Av. Belgrano con un convenio con la obra social OSPLAD y el Nº 10 estaba en Ciudad Universitaria, pero también pasó por la ex ESMA y las escuelas Raggio.
 
“La educación de adultos siempre fue marginal, somos márgenes dentro del sistema educativo”, dice el director del CENS Nº 61. “En la provincia dependemos de la Dirección de Educación Media, eso hace que tengamos chicos de 16 años, convivimos con menores y mayores, y la complejidad que esto representa, una cosa es trabajar con mayores y otra cosa trabajar con menores y mayores”, explica Julio. “La población de adultos mayores se ha reducido bastante, ahora tenemos mucha incidencia de adultos jóvenes de entre 18 y veintitantos, porque son los repitentes, los que fueron expulsados del sistema”, declara Alberto.
 
Entre los tres CENS que funcionan en la calle Balboa cursan unos 100 alumnos. La matrícula va variando a lo largo del año ya que la deserción escolar es muy alta. Depende mucho de los años, de la situación social del momento, cuando hay más desempleo, por ejemplo.  “Un alumno que encuentra trabajo y se le complica con el horario va a dejar, ahí vemos la posibilidad de flexibilizarnos un poco para su reingreso. En La Paternal hubo un cambio en la población de alumnos, porque antes estábamos en Palermo y era bastante diferente, acá hay situaciones de mayor marginalidad, de mayor dificultad, problemas de adicción, situaciones delictivas, alumnos que han vivido en la calle, mayor complejidad. Tenemos que acomodar nuestra historia”, declaran los directores.
 
“No tenemos mucha difusión, nosotros imprimimos volantes para promocionar los CENS. Hoy, sin ir más lejos, repartí algunos a la salida de una empresa que hay acá cerca”, comenta Julio. 
 
La mayoría de los CENS tienen una orientación contable debido a sus inicios en los años 70, cuando era importante egresar del secundario con una salida laboral asegurada. Actualmente hay una amplia gama como informática, con orientación en salud en el Hospital Durand, turismo, comunicación que funciona en la TV Pública, gastronomía, construcciones con UOCRA.
 
“Todo esto está en proceso de modificación con la NES, la Nueva Escuela Secundaria, pero todavía los CENS no hemos empezado la discusión, no sé si nos dejarán participar, ojalá que podamos intervenir, nosotros estamos pensando en las renovaciones que necesitamos, adecuar los planes de estudio a lo que mejor podría ser”, explica Alberto.   
 
El régimen es por promoción de asignaturas, no se repite, se aprueba por materia, “un régimen parecido al universitario, se cursan las materias con un trayecto diferente, permite que un alumno que ha quedado libre no tenga que perder todo el año, sino que pueda seguir haciendo alguna, se pueden cursar materias de segundo y tercer año juntos”, declara el director del CENS Nº 61. 
 
“Siempre estamos planteando proyectos de trabajo y producciones, dentro de las limitaciones que tenemos. Por ejemplo, los alumnos fabricaron juguetes con un programa que se llama Aprender Trabajando, la idea fue llevarlos a jardines de infantes, también hicieron licores en la clase de Química y ahora están trabajando en una máquina de termoformado, que son las máquinas para hacer blisters. Tenemos el proyecto de huerta con unos maceteros que hicimos con palets. Hay proyectos para hacer una radio y el CENS Nº 10 tiene un canal de Youtube”, expone Alberto.
 
“Nos falta todavía hacer algunas cuestiones con la comunidad, hicimos obras de teatro con el Centro Cultural Lola Mora sobre temas de violencia doméstica y femicidios. Organizamos una feria de salud con el Hospital Tornú, con una jornada de vacunación y testeo de HIV express, cuestiones de talla, peso y alimentación. La Cruz Roja trajo unas máscaras que provocaban el efecto de si hubieras bebido. Se hicieron varios festivales con música en los cierres de año o para final de cuatrimestre, eso depende año a año de los grupos de alumnos que van formando bandas”, concluye el dire del CENS Nº 61.
 
La profesora de Biología Patricia Taramasco comentó que está a cargo del programa Escuelas Verdes, “armamos la huerta junto al CENS Nº 61 que aportó los maceteros, tratando de articular los tres CENS. También juntamos material de reciclaje como las tapitas que después llevamos al Hospital Garrahan”.
 
En noviembre se abre la inscripción para el ciclo 2018 en Balboa 210. Hay que presentar el título primario (original y fotocopia), en caso de tener el secundario incompleto se pide en certificado analítico de materias, fotocopia de DNI y una foto carnet. No hay problema para los extranjeros que quieran cursar y les falte alguna documentación “los papeles se acomodan en el camino”, confiesa Alberto. ¡No tenés excusa, animate a terminar el secundario!
 
Contacto: 4554-9294 / [email protected] / [email protected] 

COMENTARIOS


Plan FINES

Hay dos planes: uno es para terminar el secundario que es para los que concluyeron la cursada y deben algunas materias; el otro es una especie de CENS pero con menor exigencia, fue pensado para lugares específicos como instituciones o lugares de difícil acceso. En algunas provincias donde no existen los CENS son muy importantes.
En el CENS Nº 61 se pueden rendir las materias que se adeudan, son ocho clases de dos horas una vez por semana, hay tres etapas en el año para poder cursarlas.


UBICACIÓN