NI UNA MENOS

Frente a los señalamientos, La Cámpora aclaró que Badaracco "nunca fue militante de nuestra organización"

Algunos medios habían indicado que el principal sospechoso por el femicidio de Araceli Fulles era militante de La Cámpora. Desde la organización política señalaron que esta acusación busca "ocultar la inoperancia de las autoridades que realmente debieron actuar".

Luego de que se encontrara el cuerpo de Araceli Fulles, la joven de 22 años víctima de femicidio, Radio Mitre publicó que el principal sospechoso del asesinato, Darío Badaracco, es militante de la agrupación La Cámpora. En un breve identikit, la emisora del Grupo Clarín señaló que el hombre "tiene 29 años, está casado y tiene dos hijos. Trabaja en un corralón ubicado en Zeballos 7365, en José León Suárez, donde la policía fue a buscarlo, pero ya no estaba, por que que dos de sus compañeros quedaron detenidos por encubrimiento. Además, es militante de la agrupación kirchnerista La Campora".



Ante esta información, desde La Cámpora emitieron un comunicado para aclarar que "Darío Badaraco nunca fue militante de nuestra organización. Definirlo de esa manera, utilizando su vínculo con una compañera que concurría a una Unidad Básica de José León Suárez, tiene una clara intencionalidad política y solamente busca ensuciar a la militancia y a la organización popular". 

El texto indica que el intento de "identificar al presunto asesino como “militante de La Cámpora”, con el objetivo de ocultar la inoperancia de las autoridades que realmente debieron actuar" y señalaron que "los varones violentos y los femicidas no nacen de un repollo, están insertos en la sociedad, tienen empleos, familias, amigos; y nadie pensaría en responsabilizar a todos/as ellos/as de sus actos".

El comunicado pone el foco sobre la actuación del Gobierno Nacional, que "lanzó con bombos y platillos una plan nacional contra la violencia dé género que no aportaba nada nuevo respecto de lo que venía trabajando el Consejo Nacional de las Mujeres hasta el 2015. Un presupuesto de 700 millones que dividido en tres años no parece ser en comparación con otras áreas tan significativo y que encima arrancó el año con un recorte de casi 70 millones. “Un error”, se dijo luego".

Por ello, reafirmaron su compromiso en la lucha contra la violencia de género e indicaron que "hoy nuevamente somos todas Araceli, somos todas y cada una de las mujeres asesinadas por la violencia machista, somos todas potenciales víctimas y seguimos exigiendo Ni una menos".






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